Por María Isabel Saro Cervantes
Sexóloga Clínica Certificada
Hace unos días vi la película “Corazones”, “Coeurs” —título en francés—, ó “Pasiones Privadas en Lugares Públicos” —en Español—.
Me sorprendió una escena, que dio pauta a ésta nota; exclamé y me pregunté: ¡¡¡GUAU!!! ¿Cuándo llegará el día en que en nuestra sociedad un presunto acosador sexual nos ofrezca una disculpa por sus actos a nosotras las mujeres? UTOPÍA ABSOLUTA!!!!!
Les comento la escena, sin contarles la película:
Thierry un solterón que pasa los 60 años, es un agente de bienes raíces, tiene como compañera de trabajo a Charlotte que tiene aproximadamente su misma edad. Ella le presta un video con una serie de TV grabada sobre un video erótico que aparentemente es protagonizado por ella misma, lo que despierta el interés de Thierry en ella; y suponiendo que ella se le ha insinuando por las escenas del video, se atreve después de adularle su bella sonrisa, a plantarle sorpresivamente un beso en la boca, a lo que ella responde con varias cachetadas. Él, muy desconcertado, se retira de la oficina. Días después regresa y sumamente apenado ofrece una disculpa a Charlotte diciéndole que si va a acusarlo ante la empresa por acoso, que proceda, que está en su derecho porque él se sobrepasó, y que no lo va a refutar.
Thierry un solterón que pasa los 60 años, es un agente de bienes raíces, tiene como compañera de trabajo a Charlotte que tiene aproximadamente su misma edad. Ella le presta un video con una serie de TV grabada sobre un video erótico que aparentemente es protagonizado por ella misma, lo que despierta el interés de Thierry en ella; y suponiendo que ella se le ha insinuando por las escenas del video, se atreve después de adularle su bella sonrisa, a plantarle sorpresivamente un beso en la boca, a lo que ella responde con varias cachetadas. Él, muy desconcertado, se retira de la oficina. Días después regresa y sumamente apenado ofrece una disculpa a Charlotte diciéndole que si va a acusarlo ante la empresa por acoso, que proceda, que está en su derecho porque él se sobrepasó, y que no lo va a refutar.
En nuestra sociedad, el acoso sexual es un delito tipificado en el artículo 259 bis del Código Penal, y la sanción, ridícula por cierto, es de hasta cuarenta días multa. Lo anterior nos hace todavía más vulnerables a las mujeres, y digo a las mujeres, no porque los varones no sean acosados sino porque la mayor parte de los abusos proviene de ellos.
Además, si somos realistas, nuestras autoridades nos promueven la denuncia, nos promueven acudir a instituciones como INMUJERES, el CAVI entre otras, que si bien de inicio tienen buenas intenciones, generalmente empoderan a las mujeres y luego que ya han denunciado a su agresor ante el Ministerio Público, resulta que son abandonadas a su suerte por dichas instituciones, entrando a un verdadero “viacrucis” que las llevará, aparte de ser víctimas de acoso, a ser nuevamente victimizadas ya que se encuentran frente a una sociedad y unas autoridades culturalmente determinadas. Frases como: ¡tú lo provocaste! ¿Cómo ibas vestida? ¿Te toqueteó? ¿Dónde y cómo? y ¡Vas a perder tu trabajo! son con frecuencia escuchadas.
El día que en nuestra sociedad los hombres estén conscientes del daño que causan a la dignidad de las mujeres, entonces estaremos acercándonos a la vía hacia la utopía ¡pongamos el índice en ello!
*María Isabel Saro, es Terapeuta sexual, sexóloga certificada por el Consejo de Calificación de Profesionales en Educación Sexual y Sexología (CAPSEX) y asesora externa en la Asamblea Legislativa del Distrito Federal. Si te identificas con este u otros artículos y deseas una consulta personal o a traves de Internet, puedes solicitarla en los correos electrónicos grupo_ies@yahoo.com.mx y consultas@sinporno.org.mx o mediante mensaje de texto al 044-5518207777. En la Ciudad de México y Cuernavaca 55 63 37 31.
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